Chopin.

07 junio 2014







Tú, que respiraste en mi pecho el camino de los sueños,  que sembraste de rosas las vigilias conquistadas,  que abrigaste mi silencio  y me guardaste entre tus labios…

Tú, que arropaste mis miedos  y los dejaste ir con el viento de la tarde…
Tú, hacedor de mis suspiros,  alondra de mis días,  fuego y semilla,  lluvia y raíz,  canto y cielo…
Tú… anclado en mi mar,  te declaro mi puerto y mi horizonte.

  Hoy quiero hablarles de alguien especial, alguien cuyo corazón lucha contra las sombras diarias. Esta persona, que tal vez pasa desapercib...