Dile a la tristeza que no la extraño, que soy mas fuerte desde que ella no está, que no vuelva, no la necesito.
Dile que aprendí a sonreír, no sólo al público, si no que también al espejo, dile que me veo mejor sin ella, que me hice amiga de otros sentimientos, dile también que ya no tiene poder sobre mí.
Si ves a la tristeza dile que me he trasladado a un mundo nuevo, que no me busque, porque no me va a encontrar, dile que no pierda su tiempo en tratar de alcanzarme de nuevo, dile que siga vagando, buscando otro cuerpo débil donde posicionarse, que el mío ya no le pertenece, dile que hace tiempo que ya dejé de ser su cómplice.