¡Qué importa! si nos aprueban o nos condenan, si guarecemos la luna y pintamos de colores las estrellas, si desbordas la sangre de mis venas cuanto te miro de lejos y te siento cerca.
Nadie entenderá lo que sentimos, la codicia de tu boca y el placer de mis sentidos, los versos que me susurras al oído, el guiño de la aurora y la complicidad del destino.
!Qué importa! si eres cazador y yo tu presa, el forastero de mis delirios, si mutamos palabras por suspiros, si arrancamos escombros y plantamos ilusiones bajo la tierra.
Aquí lo único que importa es tu latido y el mío.
Nadie entenderá lo que sentimos, la codicia de tu boca y el placer de mis sentidos, los versos que me susurras al oído, el guiño de la aurora y la complicidad del destino.
!Qué importa! si eres cazador y yo tu presa, el forastero de mis delirios, si mutamos palabras por suspiros, si arrancamos escombros y plantamos ilusiones bajo la tierra.
Aquí lo único que importa es tu latido y el mío.