Chopin.

14 septiembre 2014






En el mar de mis pensamientos vuelvo siempre, en esos intensos momentos que te recuerdo.

Me acuerdo de ti,  como gaviota de alas blancas, sueltas, que junto a mi cuerpo  se transforman en brazos fuertes.
Gaviota que se alimenta en el mar de mi cuerpo.
Llegaste con el olor de las palabras,  de frases no inventadas; lograste liberar de mi pecho sentimientos y deseos.
Confieso a la brisa del mar el deseo de tenerte, una y otra vez, entre mis brazos,  dentro de mi...

  Hoy quiero hablarles de alguien especial, alguien cuyo corazón lucha contra las sombras diarias. Esta persona, que tal vez pasa desapercib...