Chopin.

30 diciembre 2013

¡¡¡BIENVENIDO 2014!!!

Ha llegado el momento para decir: “Adiós y gracias 2013″, momento que la humanidad entera quisiera abrazar y retener, momento en que se cierra el último capítulo de este libro, se nos va para siempre. 

El reloj se vacía inclemente una vez más para despedirse y desprenderse de este galante caballero que nos deja y se prepara para entrar en reposo e ir en pos de los dulces sueños de la inmortalidad. Le pondré su pijama pues ya está listo para irse a descansar en los brazos de su amada e inseparable compañera: La eternidad, pero no se va del todo, él se queda en nuestros corazones, y en los registros de nuestra memoria. Se queda en la esperanza de un nuevo retoñar, y una nueva etapa llena de promesas en nuestras vidas, un nuevo motivo para continuar la labor que se ha quedado inconclusa, o suspendida. 

Es inevitable contener las lágrimas y un cúmulo de recuerdos se cruza y revolotea como pájaros nocturnos, golpeando las paredes de la mente buscando una salida, principalmente cuando se acercan las 12 de la noche, encogiendo el corazón. 

Los rituales ya están listos, el champaña está servido en las copas, esperando las doce campanadas para realizar el brindis, añorando como nunca lo que más nos hizo feliz y algunos recuerdos nos pesan como fardo abrumador sobre la espalda. 

Me gustaría tomar el teléfono y llamar a ese alguien especial que está lejos y abrazarlo primero a él que a todos ¡pero, no puede ser! sólo emito un hermoso y el más dulce pensamiento salido de lo más hondo de mi ser, montado en las alas de un suspiro: “Feliz año mi amor, donde quiera que estés”. 

Adiós 2013, te despido y me desprendo de ti con fuerza y madurez, con entereza y mucha confianza…y también con el corazón en paz. Empezaré este nuevo año sin lágrimas, lo haré con una sonrisa, con un suspiro lleno de fe, de esperanza, de alegría y de luz, porque sé que estará lleno de sueños, de lindos amaneceres y de hermosos atardeceres. ¡¡¡BIENVENIDO 2014!!!

  Hoy quiero hablarles de alguien especial, alguien cuyo corazón lucha contra las sombras diarias. Esta persona, que tal vez pasa desapercib...