Para Pablo

Ser “Abuela” despierta, renace, revive juveniles alegrías. Eres un anhelo, una esperanza de tiempos nuevos. Hoy flotas con despreocupada placidez en tu ámbito seguro, perfecto, tus padres te abrazan entre sueños, acunando el vientre con infinito amor. Quiero contarte que te esperan afectos entrañables, que todos ya te amamos y te nombramos expectantes. Quiero contarte que tu madre te acunará con caricias interminables, que en sus brazos dulces sueños siempre tendrás, que su sonrisa soleada te confortará y el calor de su pecho te cobijará. Que tu padre te sostendrá con ternura, con orgullo juguetón te protegerá y guiará. Que los brazos tibios y seguros de ambos te recibirán, Y será una dulce fiesta de ternura, mimos, besos y caricias. No temas… cuando sea el momento, abrirás los ojos y en los de ellos te cobijarás, y al amparo de sus tiernos cuidados crecerás. "Duérmete mi niño, no llores, acaso no sientes en el pelo como te acarician los dedos de plata que estira la Luna, que bajan del cielo a tocar tu cuna. No llores mi niño, cierre sus ojitos que a su sueño blanco vendrán mariposas y los pajaritos cantaran un coro, pero muy bajito para que tu duermas. Duerme mi niño que tengo en mis ojos toda la ternura que he llevado dentro y que se me escapa rodando en la cara cuando te miro, no llores ya verás que el sueño tapa con un manto todos los dolores, duérmete mi niño pedacito de cielo que velando tu sueño estará tu abuela"