Chopin.

16 septiembre 2013

Te escribo no sólo por placer sino más bien por necesidad, te escribo pues en esta soledad estás en cada lugar, te escribo para hablar y saber cómo estás y si en mí haz de pensar, te escribo a toda hora y en todo lugar te has vuelto mi necesidad, a ti el hombre que no dejo de soñar.

  Hoy quiero hablarles de alguien especial, alguien cuyo corazón lucha contra las sombras diarias. Esta persona, que tal vez pasa desapercib...