Chopin.

27 febrero 2025

 El imperialismo busca dividir a América Latina porque, al fragmentar a los países de la región, puede mantener su control económico, político y cultural sobre ellos. Una América Latina unida tendría mayor capacidad para negociar, proteger sus recursos naturales, y construir un modelo de desarrollo independiente que no dependa de potencias extranjeras.

Esta estrategia de división tiene varias razones:

América Latina es rica en recursos naturales como petróleo, minerales, agua y biodiversidad. Divididos, los países tienen menos capacidad para proteger esos recursos frente a empresas transnacionales o intereses extranjeros.

Un bloque latinoamericano unido tendría un peso geopolítico más grande en el escenario global. Dividir a los países permite que las potencias dominantes impongan tratados comerciales, acuerdos desfavorables o incluso intervenciones políticas y económicas.

A través de acuerdos bilaterales en lugar de multilaterales, las potencias imperialistas logran que los países de América Latina dependan económicamente de ellas. Esto reduce las posibilidades de que se desarrollen mercados internos o alianzas más justas entre naciones vecinas.

Mantener a los países enfrentados permite imponer ideologías favorables al imperialismo, debilitando movimientos sociales o gobiernos que buscan modelos de desarrollo alternativos.

En resumen, la división beneficia al imperialismo porque dificulta la resistencia colectiva y perpetúa un sistema en el que América Latina es vista como proveedora de materias primas y mano de obra barata, en lugar de como un conjunto de naciones soberanas capaces de decidir su propio destino.

 Hace un poco más de 7 años, mi situación llegó a un punto crítico. La acumulación de dolores, tanto físicos como emocionales, y la sensación de haber perdido el control de mi vida me llevaron a un estado de desesperación absoluta. 

En ese momento, no podía ver más allá del sufrimiento diario, y la idea de seguir adelante parecía insoportable. Fue entonces cuando intenté, de manera consciente, salir de este plano, creyendo que esa era la única forma de encontrar alivio.


Recuerdo ese período con una mezcla de tristeza y compasión hacia mí misma. 

Estaba atrapada en un lugar oscuro, donde el dolor nublaba todo lo demás, incluso las pequeñas cosas que aún podían darme esperanza. En ese momento, no veía opciones, solo el peso abrumador de todo lo que había perdido.


Sin embargo, algo me detuvo. Puede que haya sido una pequeña chispa de vida en mi interior, o el apoyo de las personas que me rodeaban, aunque no lo percibiera claramente en ese instante. Ese momento marcó un antes y un después en mi vida, porque desde ahí comencé a darme cuenta de que necesitaba ayuda y que no podía enfrentar esto sola.


Fue un proceso lento, lleno de tropiezos, pero buscar apoyo profesional, hablar de lo que sentía y conectarme con personas en situaciones similares me ayudaron a entender que no estaba sola. 

Mirando hacia atrás, me doy cuenta de que ese intento desesperado no fue un final, sino el inicio de un camino difícil pero necesario hacia la sanación.

04 febrero 2025

La playa

 Hoy me sentí triste y frustrada. Estando en la playa, ese lugar que tanto me gusta, ese lugar que siempre llena de calma, quise caminar y no pude hacerlo. Fue un golpe emocional, como si el peso de todo lo que cargo se hiciera aún más evidente frente a algo tan sencillo como dar unos pasos en la arena. Fue una mezcla de impotencia, algo de rabia conmigo misma y una pena, una profunda pena. Intenté contenerme, pero terminé llorando, sentirme tan limitada me golpeó fuerte, como si una parte de mí estuviera perdiéndose algo valioso. Es un día difícil, uno de esos en los que el dolor y las limitaciones parecen más grandes que yo. 

Fue como si todo el peso de lo que siento cada día se hubiera acumulado y estallado de golpe. 

Me sentí sobrepasada, como si no pudiera con todo esto. En ese momento, el dolor y las emociones fueron demasiado, y lo único que pude hacer fue dejar que salieran en forma de lágrimas.

Estos momentos de vulnerabilidad son difíciles, pero también son reales.

Aquí estoy, intentando no dejar que me derrote del todo.

  e la Mujer Queridas mujeres, Hoy conmemorámos el  Día Internacional de la Mujer , una fecha que va más allá de las felicitaciones, las flo...